_ David…
Entonces Maica me cogió
del brazo y me apartó para hablar conmigo a solas.
_ Anabel, se que le
quieres y te puedo asegurar que él a ti también. ¿Qué te hizo daño? Pues si,
pero no fue intencionadamente, no pensaba que le querías y lo dijo por tal de
que no te rieras de él porque me ha contado Manuel que no serias la primera que
se riera.
_ ¿Cómo que no sería la
primera?
_ Pues en su clase hay
una por la que todos están loquitos y él le dijo que la quería y… bueno eso, se
rió del él y el pobre lo pasó fatal.
Al oír eso me puse a
llorar, el pobre no lo había dicho con mala intención y bueno… el comentario no
me gustó nada pero yo sabía lo que era. Querer a alguien, decírselo y que se ría
de ti es horrible…
_Como cuentes algo te
mato y encima me matan a mi.
_Tranquila, no diré nada.
Volví y me puse delante
de él.
_ Ese comentario me dolió…
pero te quiero y no puedo seguir así… siento que lo hayas pasado mal por mi,
soy una estúpida_ Entonces reí.
De pronto todo el mundo
desapareció, estábamos solos él y yo. No sabía que hacer. Me invitó a sentarme
a su lado y lo hice. Entonces decidí contarle que solo me quedaba un día allí.
_David, tengo que decirte
algo… Pasado mañana me vuelvo a mi casa.
_ ¿¡Qué!?
_ Tranquilo, no nos
veremos todos los días como desde que estoy aquí, pero vendré todos los fines
de semana, con alguna excepción.
_ Te echaré de menos,
cada segundo, cada minuto, cada hora, cada día se me harán eternos sin ti.
_ Que tontillo eres. _No
pude evitar partirme de risa.
_ Hoy hay luna llena…
_ Ese es el típico
comentario en todas las pelis, pero en ti suena especial.
Rió.
_Que cursi eres. _Dijo
con una sonrisa
_Habló el que no lo es. _
Me partía yo sola.
Entonces empezó a
acercarse… a acercarse más y más… hasta que note sus labios contra los míos. Fue
un beso… indescriptible. Hubo un pequeño silencio hasta que él lo rompió.
_ Al fin juntos…
_ ¡Ale!, ¡más cursiladas!
Nos reímos.
Entonces apareció Dani
Fernández.
_ David, más te vale cuidármela
bien. Es como mi hermanita peque y la quiero mucho.
_ Hay Dani, yo si que te
quiero. _Me levanté y le abracé. _David, ¿sabes qué? Que me voy a ir con Dani.
_ ¿Cómo?
_Comiendo. _Dijo Lucía
que acababa de aparecer. _ ¿De que habláis?
_ ¿Dónde están los otros?
_ En tu piso, están allí
tos apretujaos. _Se partía.
_ ¿Tan bonito es? _Yo si
que es verdad que me estaba meando de la risa.
Subimos y me dice mi
madre:
_ Anabel, dice David
Lafuente que te invita a ir a dormir al hotel, bueno a ti, a Maica y a Lucía.
_ ¡Qué morro! _Dijo Inés.
_ Esque a ti te invito
yo. _Le contestó Carlos.
Inés se quedó de piedra,
estaba a punto de desmayarse.
_ Como amigos solamente
vayas a pensarte…
_ Jolín. _Puso carita
triste.
_Ya se había hecho
ilusiones la pobre. _Todos nos partíamos.
_Bueno Anabel, ¿qué me
dices?_ Me preguntó David Lafuente,
_ Pues que encantada de
la vida. _Reí.
Vale, lo admito, estaba
al borde de un infarto. Mi ídolo me había invitado a ir a un hotel (iban más
amigas pero en ese momento no estaba como para pensar en ellas).
_ ¡Nosotras no faltamos!
_Gritaron Maica y Lucía eufóricas.
_Paso a recogeros a las
10. _Dijo Blas.
_ ¿Tú? Vale, ya si que es
verdad que me muero. _Dije.
Cada uno se fue para su
casa o donde quiera que estuvieran y a las 10 menos cuarto ya tenía a las tres
locas allí.
Llegó Blas y nos subimos
al coche (vino en coche porque no venía del hotel, el hotel no estaba tan lejos).
Yo claramente delante, con él.
_ Lucía, no voy a pasar
nada de tiempo con David… pero bueno, le veré todos los fines de semana.
_ Deja de pensar en ese
que ahora vamos de fiesta. _Dijo Blas como molesto.
_ Huy que sargento. _Se
le escapó a Inés.
_ Ya verás cuando
lleguemos, te voy a hacer cosquillas hasta que me canse y te aseguro que no me
canso pronto.
_ Antes me tendrás que
pillar.
_Te pillaré.
_ Bueno dejaros ahora de
piques. _Nos reíamos.
Lleguemos al hotel, Blas
me había dicho el número de habitación de David así que salí disparada hacia
ella. Llegué a la que me había dicho y la puerta se abrió. Era un viejo con una
toalla liada a la cintura, me entraron ganas de vomitar.
_ ¡Ya era hora! Pasa,
pasa.
_ Creo que me he equivocado.
_ Mira, me la han mandado
graciosa y todo.
_ ¿De que hablas?
_Yo ya estoy listo, ¿a
que soy guapo?
_ No pienso responder. ¿A
que viene todo esto?
_ ¿Es que no eres la prostituta que he pedido?
_ ¿¡Qué dices!?
_ Ya decía que eras
demasiado pequeña.
Me cerró la puerta en las
narices y me quedé flipando. Entonces escuché a alguien reír. Eran los 5 pavos
y las 3 tontillas.
_ ¡Os mato!
_ Me quieres demasiado. _Dijo
Álvaro poniéndose delante de mí.
_ Tienes razón. ¡Pues
mato a los otros 7!
Salí detrás de Blas el
primero hasta que lo perdí de vista. Pasé por delante de la puerta número 7058,
alguien me cogió de la cintura y me hizo entrar. Era Blas y me tenía agarrada
para que lo le matara.
_ ¡Blas!, te mato, te
mato, ¡te mato!
_ ¡Pero si ha sido para
reírnos un rato!
_ Os habéis reído
vosotros, ¡yo no!_ Dije cabreada.
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Poned comentarios plis :)
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